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Alquimia
Desarrollada en la Europa Medieval, la alquimia occidental recibió influencias tanto del antiguo Egipto como de Mesopotamia.
El rigor era un medio de tratar de obtener oro o plata a partir de los metales inferiores, pero la alquimia poseía también una gran importancia simbólica para sus adeptos: transformar un metal vulgar en oro significaría la transformación de algo impuro en algo puro y por lo tanto, el tránsito espiritual desde la ignorancia a la iluminación.
LA PIEDRA FILOSOFAL
Este complejo símbolo representa la piedra filosofal y encarna una serie de principios clave del mundo de la alquimia. El triángulo simboliza las tres sustancias celestiales (sal, azufre y mercurio); el cuadro representa los cuatro elementos; el círculo alude a la noción filosófica de que “Todo es uno”.
SELLO DE SALOMÓN
El Sello de salomón, una estrella de seis puntas, es un símbolo procedente del judaísmo. Al combinar los símbolos del Fuego y el Agua, representa la unión de los contrarios y la transmutación final de los procesos alquímicos.
EL SOL Y LA LUNA
Empleado por los alquimistas para representar el Oro, el Sol significaba la perfección. El punto en el centro simbolizaba la culminación de la “Obra Mayor”. La Luna, símbolo de la intuición y la fertilidad, así como el cuerpo en contraposición al alma del Sol.
TIERRA
Primero de los cuatro elementos de la alquimia, la Tierra representa los aspectos secos y fríos del proceso. Simboliza el nacimiento y la creación y está asociada al Cobre.
AGUA
Segundo elemento de los cuatro de la alquimia, el Agua representa a las fases frías y húmedas de proceso. Simboliza el proceso de purificación y está asociada al Estaño.
AIRE
Tercero de los cuatro elementos de la alquimia, el aire representa las fases calidad y húmedas del proceso. Simboliza el aliento de la vida y está asociada al hierro.
FUEGO
Último de los cuatro elementos de la alquimia, el fuego representa las fases cálidas y secas del proceso. Está asociado con el Plomo y simboliza la transformación final.
AZUFRE
El Azufre es una de las tres sustancias celestiales que componen la materia vil. Su fuerza seca y fogosa, reacciona con la fluidez del Mercurio y simboliza el deseo de alcanzar una espiritualidad superior. El Azufre solía asociarse a las cualidades masculinas, en contraposición a las femeninas del Mercurio.
MERCURIO
Junto con el Sol y el Azufre, el mercurio es una de las tres sustancias celestiales. Su fluidez representa la transición desde el vil metal al oro y es un símbolo de la unión de lo espiritual y lo material.
AVE FÉNIX
Con la puesta del huevo entre las cenizas antes de morir entre las llamas, el Ave Fénix simboliza la última fase del proceso alquímico, la transformación en oro y la perfección filosófica.
URÓBOROS
El Uróboros es una serpiente que se muerde la cola, formando así un círculo. Como tal, simboliza la continuidad y la inmortalidad, además del principio alquímico de que “Todo es Uno”.
CADUCEO
La vara del Caduceo representa la unión de contrarios como el Mercurio y el Azufre, así mismo el poder de transformar, mientras que las alas simbolizan el equilibrio resultante del proceso.
LEÓN VERDE
Representación del “Vitriolo Verce”, líquido altamente corrosivo empleado para numerosos procesos alquímicos. El León aparece devorando al Sol y simboliza el producto final del proceso alquímico, el Oro.
ÁGUILA
Símbolo de la transmutación del vil metal en Oro y por lo tanto de la muerte de lo impuro y el nacimiento de lo puro, el Águila con las alas extendidas representa al Aire y el Mercurio en contraposición a la Tierra y el Azufre del León.
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